Jamela, Madleen, Iradia son algunos de los nombres de las mujeres refugiadas de Palestina cuyas historias han sido ilustradas por estudiantes de las Escuelas de Arte de Zaragoza y de Teruel que han participado en un proceso de sensibilización y creatividad. Sus ilustraciones reflejan la dignidad, determinación y capacidad de lucha constante de las mujeres refugiadas de Palestina que viven en la Franja de Gaza, un pequeño enclave costero de 365 Km2, bloqueado por aire, mar y tierra desde el año 2007.
1.5 son personas refugiadas y el 80% depende de la ayuda humanitaria para sobrevivir.
Jamela al igual que otras mujeres que viven en Gaza no se rinde, demuestra que es proactiva y no pierde la esperanza de conseguir un trabajo digno que le permita salir adelante.
Madleen Kullab es laúnica mujer pescadora en Gaza. Ella, además de abrirse un espacio en este oficio masculinizado, tiene su propia embarcación turística.
La refugiada Irada al-neen es ingeniera agrónoma y ha desarrollado el cultivo hidropónico mediante esta práctica se consume 90% menos agua que en la agricultura convencional y se produce productos a alto rendimiento al tiempo que utiliza menos terreno.
Sin luz, sin recursos, sin equipos y con fuertes restricciones a la movilidad, ocasionan que las probabilidades de sobrevivir al cáncer de mama sean del 65%.
La científica Marah Shubair es la primera y única profesional habilitada para poder usar un dispositivo de radioterapia en Gaza, un equipo tan necesario para tratar el cáncer.
Sin embargo, cada vez es más difícil llevarla a cabo debido a las fuertes restricciones impuestas por Israel en el acceso a la tierra, sobre todo, de aquellas zonas que se encuentran cerca de la barrera que aísla Gaza del mundo.
Ahlam al Sumairi forma parte del equipo de agricultoras de Gaza que con su trabajo diario en el campo mantiene viva esta tradición.
Pero la educación no se detiene, Asmaa Muammar es una de las 22.000 docentes que da formación a cerca de medio millón de estudiantes en Gaza. Ella ganó la Medalla de Oro del Premio Global Creative Women 2021, una iniciativa de Global Trainer Academy.
Amjad Saed Shabat, trabaja como traductora en inglés y árabe para una web de noticias en Gaza. Ella, montando su bicicleta, rompe con las barreras físicas y sociales para conseguir alcanzas sus metas.
Sin embargo, el cierre de las escuelas durante la pandemia de la COVID-19 dio muestra de la importancia que tiene la educación para la infancia refugiada de Palestina.
Fajir Hamid, de 13 años se convirtió en todo un ejemplo de resiliencia al convertirse en la maestra de los niños y niñas de su vecindario.
Ellas están más expuestas al trabajo informal, a explotación y/o a nefastas condiciones laborales, sin embargo, despliegan todo su ingenio para mantener a sus familias. Maha es una de las 300 bordadoras del Centro Sufala, mediante sus habilidades con el bordado accede a un sueldo digno y mantiene a su familia a la vez que contribuye a preservar la tradición y cultura del bordado palestino.
Unas cadenas que las mujeres intentan romper gracias al apoyo de otras. La artista plástica Abrir Jibril demuestra a través de su obra las difíciles condiciones a las que se enfrentan las mujeres en Gaza. Sus creaciones plasman la resiliencia palestina, reivindicando la necesidad de construir un mundo más justo.
